Shinichi Suzuki y Genichi Kawakami fueron dos pedagogos que revolucionaron el mundo de la pedagogía musical con sus métodos instrumentales. Ambos concibieron el aprendizaje de la música como un lengua materna, por ello su aplicación comienza desde edades tempranas. Asimismo, sostuvieron que el talento se construye a través de una práctica continuada y no se trata de una capacidad innata.
Comenzando por el método Suzuki cabe destacar que se trata de un método de iniciación musico-instrumental dirigido, en un primer momento, al aprendizaje del violín. Sus métodos pedagógicos están basados en el proceso del aprendizaje de la propia lengua, tomando como punto de partida la observación y la imitación. El niño/a aprende escuchando a su profesor e imitándolo, favoreciendo el desarrollo del oído musical.
Posteriormente, surge en el siglo XX un nuevo método músico-instrumental, en esta ocasión destinado al aprendizaje de los teclados electrónicos. Al igual que el método Suzuki, esta nueva propuesta considera oportuno el prematuro aprendizaje de la música (4-5 años), pues es en ese momento cuando su capacidad auditiva se encuentra en su máximo potencial. Su metodología es muy similar a la que propone Suzuki, a diferencia de que los niños/as Yamaha sí incluirán el aprendizaje de lecto-escritura musical.
Asimismo, ambos métodos compartían las características que propone la educación japonesa. Esta educación otorga gran importancia al aprendizaje en grupo, así como a la implicación de las familias en el proceso de aprendizaje. Ante este último aspecto, cabe resaltar que para ambos métodos es primordial que un familiar (generalmente la madre) acompañe a su hijo a las clases y además aprenda con el, sirviendo de apoyo al aprendizaje de sus hijos/as.
En definitiva, ambos métodos son muy similares y proponen una metodología creativa que, al ser muy atractiva y lúdica, potencia el interés de los niños/as por el aprendizaje musical.
Realizado por: Lidia Guilloto
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